La historia de la ilusión y el desengaño de un país entero

En 1992, la ilusión de un país en transformación alcanzó su punto álgido y nos hizo creer que lo teníamos todo ganado. Pero no. Ese verano, varios jóvenes descubrirán las sombras que se ocultan tras todo lo que reluce.

Deslumbrados por sus sueños, Clara, a sus catorce años, se escapará de su casa en el extrarradio madrileño y se subirá a un autobús rumbo a Barcelona para vivir el furor de los Juegos Olímpicos y conocer a su heroína, Arantxa Sánchez Vicario; Polo cubrirá los Juegos como periodista, convencido de que tiene un gran futuro por delante, y su compañero de piso, Jaime, se embarcará en lo que cree que es, por fin, la vida adulta. Como en todas las aventuras de juventud, sus planes, tan cargados de ilusión, se convertirán en esa carrera de obstáculos llena de desengaños que no es otra cosa que madurar.

En Lo nuestro, Enrique Llamas traza un retrato preciso, sutil y sensible de aquel sueño colectivo que terminó estrellándose, esa verdad implacable que es la pérdida de la inocencia.

La historia de la ilusión y el desengaño de un país entero

En 1992, la ilusión de un país en transformación alcanzó su punto álgido y nos hizo creer que lo teníamos todo ganado. Pero no. Ese verano, varios jóvenes descubrirán las sombras que se ocultan tras todo lo que reluce.

Deslumbrados por sus sueños, Clara, a sus catorce años, se escapará de su casa en el extrarradio madrileño y se subirá a un autobús rumbo a Barcelona para vivir el furor de los Juegos Olímpicos y conocer a su heroína, Arantxa Sánchez Vicario; Polo cubrirá los Juegos como periodista, convencido de que tiene un gran futuro por delante, y su compañero de piso, Jaime, se embarcará en lo que cree que es, por fin, la vida adulta. Como en todas las aventuras de juventud, sus planes, tan cargados de ilusión, se convertirán en esa carrera de obstáculos llena de desengaños que no es otra cosa que madurar.

En Lo nuestro, Enrique Llamas traza un retrato preciso, sutil y sensible de aquel sueño colectivo que terminó estrellándose, esa verdad implacable que es la pérdida de la inocencia.

Sobre Los Caín:

«Desde las primeras líneas, rápidamente comprendemos que no podremos dejar Los Caín: nos ayuda a contemplar lo que fuimos para entender lo que somos». Guillermo Altares, El País

«Una prosa precisa y vigorosa. Cuando una nueva voz reclama su puesto, es fácil de distinguir». Ignacio del Valle

Sobre Todos estábamos vivos:

«Ningún lector de Los Caín, uno de los debuts más prometedores de la narrativa española de las últimas décadas, habrá dejado de esperar con ansiedad la segunda novela de Enrique Llamas. Estamos de enhorabuena». Almudena Grandes

«La Movida, esa época en la que Madrid fue una fiesta, ha sido muchas veces contada, pero pocas narrada como lo hace Enrique Llamas. Su estilo, tan personal como rico en matices, reescribe una historia mítica respetando su esencia y sus raíces. Una novela única». Inés Martín Rodrigo