La indignación no es simplemente ira o rabia individual, sino una experiencia que requiere consciencia social y un horizonte compartido. Cuando nos indignamos, estamos expresando nuestra concepción de cómo debería ser el mundo, ubicando las injusticias en un orden común donde reconocemos qué es lo justo. Este libro explora precisamente esa dimensión social de la indignación como brújula moral que orienta la construcción de sociedades más justas.

Recopilando estudios de investigadores internacionales, la obra se organiza en dos bloques: "Reflexiones", que analiza cómo se constituye la indignación, su concepto y función social; y "Escenarios de indignación", que examina su presencia en nuestro contexto cultural.

Con este recorrido, la obra busca desarrollar una topología del orden social que nos ayude a comprender mejor cómo habitamos el mundo común y cómo podemos enfrentar juntos los desafíos que compartimos. Así, ofrece un espacio de reflexión para indignaciones pasadas, presentes y futuras.