-«Lo ideal es no tener que hacer sacrificios-», me dices. Escribo un diario porque me siento solo, porque no encuentro otra forma de acabar con esta tarde. Escribo un ensayo porque detecto en nuestro arte un miedo secreto a la sustancia de las palabras. Miedo a mostrarse atravesados por una verdad esencial, miedo a la trascendencia, a emocionarse con algo que no sea superficial o no admita distanciamiento. Miedo a vincularse. Lo mismo que en el amor, pues no son para m¡ cosas distintas. Este libro pretende militar contra ese miedo. Lo escribo para convencerme de lo que en él defiendo, para renovar mi fe. Si escribo un poema lo hago sin más pretensión que la de entender dignamente mi soledad. El sacrificio es un modo de celebrar, de dar las gracias.Todo esto me digo. ,
Lesen Sie mehr