Este libro estudia la trayectoria de las familias vascas y navarras establecidas en el comercio y las finanzas de Madrid en el siglo XVIII y primer tercio del XIX y las redes que formaron alrededor. Estas familias constituyeron una élite comercial y financiera predominante en la dirección de los Cinco Gremios Mayores de Madrid, los bancos de San Carlos y San Fernando y la Compañía de Filipinas. Entre otras actividades fueron banqueros privados y se dedicaron al negocio de lana, actividad compleja con fuerte componente financiero internacional. Sus actividades tuvieron carácter eminentemente práctico, por lo que el desarrollo de nuevas ideas y valores ilustrados despertaron su interés sobre algunos aspectos, como la aparición y expansión de la nueva Economía Política, su presencia activa en las Sociedades Económicas de Amigos del País o la puesta en práctica de las ideas ilustradas sobre la mejora de la educación, lo que manifiesta la integración de estas familias en los grupos ilustrados que se incorporaron al servicio de la Corona y, finalmente, dieron el salto a la participación política tras la crisis de 1808.