El ginjoler vessant son fruit, ganador del Premi de Poesia Joan Duch per a Joves Escriptors 2010, recoge los poemas escritos por Emili Sánchez-Rubio. El autor se inspira en conceptos tan volátiless como la belleza i acaba dando forma a un compendio de poemas donde la idea de deambular por el segle XXI como los últimos humanos que todavía no saben cómo funciona la materia i el universo se convierte en protagonista absoluta. Emili Sánchez utiliza su inspiración y su intuición para explicar el mundo sensible que llo rodea. Acaba, aún así, sin tener muy claro qué vendrá después, en una lucha dual entre la búsqueda de nuevas preguntas, siempre má importantes que las propias respuestas, y el retorno a los orígenes, cantando el misterio de las manos que nos acarician o de los labios que queremos que nos besen